Por: Milagros Palomares @milapalomares / Vía Proyecto Migración Venezuela
La empresa Rovigo’s firmó una alianza con Maxdrone. Es el primer acuerdo para desarrollar un sistema de entregas de drones colombianos dotados de plataforma logística coreana.
El caraqueño José Alejandro Otero, de 24 años, soñó en grande y lo logró. Desde la tierra que lo acogió como migrante hace más de seis años está logrando cristalizar sus metas.
En la Cámara de Comercio de Bogotá, Otero firmó un acuerdo con Jeonghyeon Lee, representante de la empresa coreana Rovigo’s, proveedora internacional de una moderna plataforma digital para el control de procesos logísticos, a fin de instalar dicha plataforma en los drones anfibios de carga ligera llamados «escarabajo”, fabricados por la empresa colombiana Maxdrone SAS, que actualmente realiza pruebas de campo en el Aeroclub Los Campanos en el departamento del Atlántico, de cara a su fabricación en serie a partir del próximo año.
El acuerdo prevé la prueba de todo el sistema, realizando operaciones ‘deliverys’ puerto-buque-buque-puerto en la principal terminal marítima de Corea (Inchón), donde los sistema tecnológicos de la empresa coreana mantiene una importante presencia al ser la ganadora del ‘UAM Global Challenge’, qué es una competencia para descubrir compañías unicornio globales para fomentar la industria del transporte aéreo urbano (UAM).
El objetivo del acuerdo, auspiciado por la oficina comercial de la Embajada de la República de Corea en Colombia, es que ambas empresas sumen esfuerzos para “ofrecer a clientes de ambas naciones y a clientes internacionales, un sistema totalmente integrado de entregas aéreas con drones, como una solución tecnológica para optimizar procesos logísticos y de esta manera superar serios problemas de aislamiento o congestionamiento en áreas rurales o urbanas, incluso en situaciones de emergencia o catástrofe, minimizando riesgos, reduciendo costos y tiempos de entrega”, explicó José Otero, CEO de Maxdrone, desde Barranquilla, sede de la empresa nacional especializada en ‘tecnología dron’.
Por su parte, Kim Tae-Yong, CEO de la coreana Rovigo’s, expresó que su empresa está consciente del crecimiento actual y de las proyecciones futuras de los deliverys con drones a nivel mundial, ya que están orgullosos de contribuir con estos nuevos desarrollos, participar en nuevos mercados.
«Aportamos a esta alianza una plataforma robusta, ágil, segura, fácilmente gestionable, que aún en ambientes de alta demanda, como en los puertos de Inchón, Singapur y otros puertos del mundo, pueda cumplir de manera eficaz y eficiente con la gestión, monitoreo y control de entregas con este tipo de sistema aéreo no tripulado integrandoles tecnologias que permitan su rapida implementación en sistemas portuarios y entornos urbanos”, indicó Kim Tae-Yong
Desde adolescente, su pasión por los drones llevó a José Alejandro Otero a crear en Caracas una empresa familiar especializada en el manejo de drones, fabricación, reparaciones, capacitación y servicios aeronáuticos que le abrió las puertas en la ciudad de Barranquilla en el año 2016. Con su equipo, fabricó en Venezuela drones con diferentes materiales: bambú, plástico y cartón, todo ello para probar la resistencia y durabilidad de estos materiales.
En plena crisis por la covid-19, en el año 2020, a Otero se le ocurrió la idea de diseñar un drone de icopor para transportar medicinas durante la pandemia. Esta iniciativa fue posible gracias a un equipo multidisciplinario de ingenieros electrónicos, aeronáuticos, mecatrónicos y arquitectos de diferentes regiones de Colombia que trabajan con José Alejandro en la empresa MaxDrone.
La constancia ha sido la clave de este emprendedor venezolano, que ahora será un orgullo de Colombia cuando sus drones vuelen el cielo de Singapur.
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